Cómo ayudar a tu familia a volverse ecológica

Llegar a ser una familia ecológica no es siempre un trabajo fácil, ya que todos los miembros del núcleo familiar intentarán imponer sus convicciones sobre qué significa ser ecológico. En lugar de verlo como un obstáculo, trata de abrazar la idea, escuchando las opiniones de los miembros de la familia y los compromisos que éstos pueden llegar a desarrollar.


Convertirse en una familia ecológica es un gran proceso de toma de decisiones que se realiza de manera conjunta, haciendo un presupuesto juntos para reducir el coste de la vida y realizando un compromiso para que el futuro será sostenible para tu familia.
Paso 1: Habla sobre las cuestiones ecológicas como una familia. Elige un momento en el que todos puedan reunirse. Pide a cada miembro de la familia que explique lo que significa ser ecológico para ellos y lo que están haciendo ya para ser ecológico en casa, el trabajo, la escuela y en sus actividades de ocio.

Paso 2: Pide a tu familia que expresen lo que piensan podrían hacer para ser una familia ecológica. Evita hacer sugerencias ya que todos los miembros de la familia aprecian ser escuchados y tener sus propias ideas sin interrupciones.
Puede llegar a ser una buena estrategia para preguntar a tu familia sobre sus inquietudes ecológicas y de esta forma apoyarlos u ofrecerte a ayudarlos a hacer esos cambios ecológicos que desean.

Paso 3: Trabaja a través de ideas de distinto tipo. En esta etapa, puede ser que hayas llegado a diferentes puntos de vista acerca de lo que más importa en la ecología. Habla exponiendo las distintas visiones que existen al respecto y llegar a compromisos sobre las prioridades de tu hogar. Trata de realizar una simple lista de cosas que tu familia puede cambiar y que cada miembro de la familia puede realizar. Crea una lista de cambios. Mira a tu alrededor y haz una lista de las cosas que podrías cambiar en tu casa para ser más responsable con el medio ambiente. Elige unos pocos pequeños cambios para comenzar.

Paso 4: Investiga un poco como familia. Visita la biblioteca y coge libros prestados sobre temas como la ecología en tu casa, limpieza verde, jardinería, etc., y asigna lecturas a los diferentes miembros de la familia. En esta etapa la familia será capaz de discutir los méritos, los costos, conveniencia, etc., y hacer sugerencias como un equipo, haciendo de tu núcleo familiar un centro de toma de decisiones.

Paso 5: Encuentra actividades en la casa que todo el mundo pueda ser capaz de hacer para ser más ecológico. Escoge un pequeño proyecto, para empezar, algo que no cueste mucho (o nada) y que crea un hábito saludable y no complicado. Aquí se muestran algunos ejemplos:
Conseguir que los miembros de la familia apaguen la luz cuando salgan de una habitación desocupada. Hacer o construir un jardín en el que se puedan plantar algunos alimentos. El objetivo es comer más en casa, comer productos cultivados de manera ecológica y ahorrar dinero. Ahorrar agua. Cerrar el grifo cuando uno se cepilla los dientes, arreglar los grifos que gotean, lavar el coche en un césped y no en hormigón, limpiar la piscina con regularidad para que no haya que cambiar el agua, etc. Reducir los residuos. Esto es mejor que el reciclaje, porque éste último conlleva unos costos. Aún así hay que incidir en la necesidad también de reciclar. Como recompensa adicional, el reciclaje de latas y chatarra te puede proporcionar algo de dinero extra. Puedes usarlo como un incentivo.

Paso 6: Habla sobre los hábitos alimentarios de tu familia. A menos que pertenezcas a una familia vegana, no es el momento de exigir que se vuelvan todos vegetarianos, pero por lo menos plantéalo como una opción.
Si alguien de la familia no quiere hacerse vegetariano, préstale algunos libros sobre los beneficios que conlleva para la salud una alimentación sana, como la comida vegetariana o vegana.

Paso 7: Habla sobre el transporte. Pregunta a todos la forma en que actualmente van al trabajo, a la escuela, eventos deportivos, de compras, a la tienda local, etc. Como equipo, deben que descubrir cómo muchos de los viajes que realizan tienen que ser en un solo coche. Mira de cuántas maneras se puede dejar el uso del coche, caminando, compartiendo el coche, moviéndose en bicicleta, tomando el transporte público, u otras soluciones.
¿Estás viviendo en un área con espacios para pasear? Incluso, podría ser el momento para cambiarte de casa. Si bien puede resultar caro vivir cerca del lugar del trabajo, a la larga podría resultar más barato y menos estresante vivir cerca y evitarías coger el coche. Organiza excursiones de la familia en la que todos caminen por un parque local u otro lugar, y puedan disfrutar. Pregunta a tu familia para planificar un calendario compartido en el que en un viaje en un solo coche puedan hacer varias cosas y ahorrar estar viajando de un lado para otro todo el día. Es una buena forma de ahorrar energía y tiempo.

Paso 8: Hacer ropa para mascotas con suéteres viejos. Pasa una tarde con tu familia y aprende a reutilizar cosas y hacer cosas nuevas a partir de la viejas. Todo el mundo tiene una conciencia sobre la necesidad de reciclar las bolsas de plástico, ya que son muy contaminantes. Pide prestados algunos libros de la biblioteca para elaborar objetos artesanales con materiales reciclados y consulta los cientos de sitios web que existen sobre este tema.

Comentarios

Entradas populares